Rubén Rojo
Director Gerente CICITEM
Rubén Rojo
Director Gerente CICITEM
El poder del sol, el viento y el mar, pronto podrán combinarse para producir hidrógeno de combustión limpia, según un equipo de investigadores de la Universidad Penn State. El equipo integró la tecnología de purificación de agua en un nuevo diseño de prueba de concepto para un electrolizador de agua de mar, que utiliza corriente eléctrica para dividir el hidrógeno y el oxígeno en las moléculas de agua.
Nuestro país posee 70% de su territorio en el mar, el que tiene notable riqueza en flora y fauna, y clave como factor modelador de nuestro futuro energético. El informe encargado para una economía oceánica sostenible, encontró que para el 2050 las soluciones oceánicas, podrían contribuir hasta con una quinta parte de los recortes anuales de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) fundamentales para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 °C.
El hidrógeno es una gran solución, pero se debe llevar a cabo, la única forma sostenible de hacerlo es usar energía renovable y producirla a partir del agua; también es necesario usar agua que las personas no quieren usar para otras cosas, y esa sería: el agua de mar. Entonces, la gran aspiración para producir hidrógeno podría ser combinar el agua de mar, la energía eólica y solar que se encuentran en los ambientes costeros y marinos.
A menos que el agua se desalinice antes de ingresar al electrolizador, un paso adicional costoso, los iones de cloruro en el agua de mar se convierten en gas de cloro tóxico, que degrada el equipo y se filtra al medio ambiente. Con la membrana de ósmosis inversa insertada, el agua de mar se mantiene en el lado del cátodo y los iones de cloruro son demasiado grandes para pasar a través de la membrana y llegar al ánodo, evitando la producción de cloro gaseoso. El agua de mar es un recurso naturalmente abundante; por lo tanto, producir hidrógeno verde a través de la electrólisis puede ayudar con la actual crisis energética mundial. Sin embargo, la corrosión de los electrodos por las aguas saladas dificulta la producción en masa de este H2V.
Por lo tanto, existe una necesidad crítica de una tecnología de electrocatalizador fuerte y eficaz que logre evitar o resistir la corrosión por cloruro y la formación de precipitados en los electrodos. Se han realizado intentos considerables en la electrólisis del agua de mar, aunque aún no se ha logrado la estabilidad a largo plazo…he aquí una nueva inquietud.